¿Y CUÁL es la gran venganza que los feos hemos perpetrado contra los guapos? La invención de “el interior”. Toda esa jaula de pirañas que llevamos dentro, esa bola de complejos, frustraciones, inseguridad, rencor y ganas de devolver el golpe, la hemos pintado de naranja y presentado al público con el nombre profundo y misterioso de “el interior”. Con tanto éxito, que hoy hasta los guapos quieren tener “interior” y hasta están dispuestos a fingirlo.