595


SIENDO EL mensaje de Jes煤s tan bellamente contagioso pero tan poco factible, hab铆a que encontrar una manera de asegurarlo contra la burla de los m谩s sabios. ¿Qu茅 son esos dislates de poner la otra mejilla, perdonar setenta veces siete y amar al pr贸jimo como a uno mismo? Para garantizar la supervivencia de tanta belleza no hubo m谩s remedio que convertir a un poeta en Dios, fue necesario volver sus poemas materia de fe...