Las avellanas y Maalouf. Esta tarde he ido de nuevo al supermercado y no hab铆a avellanas, pero antes de lamentarme he pensado: ¿por qu茅 armas tanto alboroto con la falta de avellanas, si tienes nueces y casta帽as de sobra? Pues suelo comprar estos tres frutos juntos, en las mismas fechas, y nunca me ha parecido uno superior al otro: es la falta de avellanas la que las est谩 situando de pronto por encima de sus compa帽eras. Y al punto he pensado en Maalouf y su libro Identidades asesinas, donde este escritor francoliban茅s dice que no hay cosa como sentirse atacado en una parte de tu identidad para que esa parte, a ra铆z del ataque, crezca hasta convertirse en toda o casi toda tu identidad: los musulmanes, al sentir atacado el Islam, convierten esa religi贸n en el centro de sus vidas; los homosexuales, al sentirse atacados en su condici贸n sexual, convierten esa condici贸n en parte esencial de su identidad; los vascos, al sentir que su idioma languidece, convierten el euskera en el centro de su identidad, etc.

No hay avellanas en los mercados de Madrid, ergo convierto las avellanas en LA fruta.