A LAS que tenemos cada vez menos ganas de participar en lo p煤blico; a las que adivinamos que detr谩s de todo reba帽o se oculta una carencia galopante de libertad; a las que hemos llegado a tal grado de confusi贸n en nuestras mentes que la 煤nica alternativa nos parece abstenernos, se nos acusa con la matraca ya muy conocida de "si no quer茅is decidir, otras decidir谩n por vosotras y ganar谩 la ultraderecha", que mira que es ruin y cobarde y chantajista. Cuando adem谩s la abstenci贸n es la paz de las mentes y el futuro del planeta: la salvaci贸n de la humanidad comienza por demorarse una hora cuando te levantas de la cama.