DE PEQUE脩A cre铆a que los cinco dedos de la mano eran insuficientes; pensaba que entre el pulgar y el dedo 铆ndice existe espacio para otro dedo ⇒el sexto dedo. ¿No ser谩 mi vida m谩s que un rechazo de las propias manos y una b煤squeda alucinada del dedo perdido?